La pandemia de COVID-19 ha dejado una huella significativa en todos los aspectos de la vida cotidiana, y la educación superior ha experimentado cambios radicales. En América Latina y el Caribe, aproximadamente 23.4 millones de estudiantes y 1.4 millones de docentes, lo que representa más del 98% de la población educativa de la región, se han visto afectados por los cierres temporales de las instituciones de educación superior debido a la pandemia.
La transición abrupta de las clases presenciales a los sistemas de aprendizaje en línea ha llevado a una revolución en la educación superior. La adopción de modelos híbridos, que combinan la enseñanza en línea y fuera de línea, ha sido impulsada por el uso de diversas plataformas digitales, incluyendo correo electrónico, videoconferencias y bibliotecas virtuales.
Esta transformación no solo implica cambios en la modalidad de enseñanza, sino que también ha destacado la necesidad de abordar varios aspectos fundamentales:
- Formación de Docentes: Es esencial fortalecer la formación de los docentes en pedagogía de la enseñanza virtual, así como en la adquisición de habilidades en teoría del aprendizaje multimedial y diseño instruccional.
- Nuevas Estrategias Pedagógicas: Considerando las experiencias y competencias diversas de los estudiantes, se busca incorporar estrategias pedagógicas innovadoras que se adapten a los perfiles cambiantes de los alumnos.
- Infraestructura de Datos Académicos: La creación de una infraestructura sólida de datos académicos se vuelve crucial, junto con la comprensión del uso de herramientas de análisis inteligente para mejorar el proceso de enseñanza y aprendizaje.
- Redefinición del Rol de la Evaluación: En el contexto de la virtualidad, es necesario repensar el papel de la evaluación dentro del proceso educativo, considerando la efectividad y relevancia en este nuevo paradigma.
A pesar de estas transformaciones, se destaca que la transformación digital va más allá de simplemente introducir tecnología. Requiere una reingeniería integral de procesos y una redefinición del modelo institucional de las universidades. La clave radica en el liderazgo efectivo de los equipos de gobierno universitarios, quienes deben impulsar estrategias que fomenten la innovación y la adopción transparente de tecnologías para toda la comunidad universitaria.
Viviane Jofre Aravena, desarrolla todo esto en su artículo que te invitamos a leer en el siguiente link https://www.scielo.cl/pdf/cienf/v27/0717-9553-cienf-27-42.pdf